Hola,
Feliz 18 cumpleaños.
He estado pensando mucho en si hacer esta carta o no. Al fin y al cabo es una fecha importante, y tú eres una persona importante.
Quería darte las gracias por lo bueno que me dejas. Aunque no te des cuenta, has sido el desencadenante de muchas cosas en mi vida. Por lo pronto, me he dado cuenta de que soy capaz de querer a una persona, de querer quedarme a su lado, rechazando mi instinto natural de huir. Porque yo antes era así, no concebía tener una relación. Por un tiempo llegué a pensar que había algo malo en mí...
Quizás por eso me adelanté tanto. Contigo sentí cosas que no había sentido antes y al conocerte lo vi tan claro que no quise esperar, sin darme cuenta de que de esa forma estaba cortando algo que apenas empezaba a brotar.
Yo, con mi historia, mi vuelta de Canadá, sin saber adónde iba ni lo que estaba haciendo con mi vida, y con el único deseo de volver a ser feliz.
Tú, con una relación apenas terminada, con una persona a la que habías querido tanto y a la vez buscando recuperar tu libertad y encontrar tu sitio. Con esa barrera que construimos alrededor de nuestro corazón cuando lo hemos entregado y nos han hecho mucho daño. Lo sé porque yo también la tengo.
Quizás siempre nos quisimos por encima de nuestras posibilidades. Queriendo quedarnos, pero con un pie en la puerta. Supongo que me fui por eso. Porque veía tus barreras en un reflejo de lo que yo era. Y aunque yo quisiera entregarlo todo, era demasiado consciente de los obstáculos y tampoco estaba dispuesta a recibir las balas a pecho descubierto.
Soy consciente de que quizás me fui en el peor momento. Quiero pensar que fuiste más feliz conmigo, que estabas mejorando por mi influencia y que realmente me quisiste como yo te quise a ti. Quizás no tanto, pero mucho sí.
Pero qué podía hacer. Si no me dejabas entrar. Tú ya habías cortado la relación mucho antes de que yo decidiese darlo por terminado. ¿Cuánto te conozco realmente?¿Cuánto de tu yo real me has dejado ver a través del disfraz? Es algo que me pregunto cuando pienso en ti e intento entenderte. Creo que me mostraste menos de lo que pienso, y a la vez más, aunque puede que no lograse captarlo.
Me dolía mucho. Cuando desaparecías. Y cuando te quedabas callado sin decirme qué pensabas o sentías. Eso era peor que cualquier cosa que pudieras haberme dicho. El no saber, el que no reaccionases. Ya no sirve de mucho, pero quizás te ayude a mejorar.
Siento que soy demasiado buena contigo. Por eso tardé tanto en decir adiós y luego siempre volvía. Quizás esto sea un poco otra vuelta. Me cuesta alejarte de forma definitiva. Pero prefiero pensar en esta carta como en un sumario de todas las cosas que tengo pendientes de decirte. Una conversación que quería tener contigo desde hace mucho tiempo, pero que no puse sobre la mesa porque temía no obtener respuesta. De esta forma no duele tanto.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Quisiera escribir sobre la tierra en mí, sobre la madre-mujer-creadora de todo en mí, recuerdos latentes que no son míos pero me pertenece...
-
Y quizás sea un favor. Porque ahora duele, pero no mata; porque te quiero, pero no te amo. Porque todavía no me he acostumbrado a verte ...
-
¿Es mejor huir o enfrentar los problemas? Yo siempre he sido mucho de huir, se me da muy bien hacerme la tonta, dejarlo pasar y hacer como...
-
Hubo un tiempo en que tus manos sostenían la materia
No hay comentarios:
Publicar un comentario