Y quizás sea un favor

Y quizás sea un favor.
Porque ahora duele, pero no mata;
porque te quiero, pero no te amo.
Porque todavía no me he acostumbrado
a verte y a tocarte,
a abrazarte y a cuidarte,
todavía estoy a tiempo de olvidarte.

Porque aunque todo lo que quiera
sea perdonarte
y busque cualquier excusa, cualquier detalle
para hacerlo, para arrepentirme
y pedirte que vuelvas y me beses
y me abraces y me limpies las lágrimas,
tú la vuelves a cagar
y me vuelves a decepcionar.
Una
y otra
y otra vez.

Tengo suerte de que te hayas dejado ver tan pronto,
antes de haber aprendido a amarte de verdad,
antes de no poder vivir sin ti.

Aún puedo decir adiós.
Óyelo.
Adiós.

30 de Abril de 2018 (diario)

Ya no estoy enfadada. Esta mañana me dolía mucho y estaba muy triste. Incluso me he vuelto a desinstalar Instagram porque no quería que mi 'yo depresiva' se martirizase mirando sus stories y sus fotos.
Después me he empezado a sentir un poco desganada, deprimida. Normalmente cuando no quiero pensar veo una peli o una serie. Esta vez tenía un libro de relatos que me ha dejado mamá. Al volver a casa me he dormido, para curar la tristeza y por no saber qué más hacer.
Al levantarme ya no me sentía tan triste, pero en su lugar me sentía vacía, infeliz. He intentado ordenar (eso suele ayudar en días así) y también les comenté a los petardos lo del elfo. Nerea está desaparecida y Marcos dijo que me llamaría más tarde (en realidad no sé si eso va a pasar, pero estaría guay).
Al final he decidido ver la película 'Napoleon Dynamite'. Es lo más absurdo e intragable que he visto en mucho tiempo. Sorprendentemente, me ha dado la fuerza necesaria para analizar mi situación con más claridad.

Me he dado cuenta de que mi vida antes del él ya estaba así de vacía. De que me ha dado esa chispa que me faltaba, esa aventura, esa compañía. Sin embargo, no sentía que le necesitase para salir de nuevo de esa situación, solo necesito encontrar qué es lo que me hace falta para ser feliz y encontrar la forma de conseguirlo.
Me he bajado al jardín con cuaderno en mano, me he sentado en un banco medio al sol y me he puesto a escribir las cosas que me hacen feliz. Esto es lo que he sacado:

   - Leer libros - hace un tiempo que no lo hacía y ahora que he vuelto a ello me doy cuenta de lo mucho que me enriquece.
   - Estar al sol - soy como las plantas, la luz del sol me revitaliza y energiza.
   - Quedar con amigos - es algo que hecho mucho en falta , ya que Marcos siempre está viajando y Nerea a su rollo con sus éxamenes y sus cosas.Tengo que cambiar esto y empezar a salir y conocer gente para no sentirme tan sola.
   - Cuidarme - cuidar de mí misma, sentirme guapa, quererme; es muy necesario.
   - Deshacerme de las cosas que no necesito ni me hacen feliz - sienta muy bien, desatasca tu vida.
   - Los abrazos - te curan el alma, te sanan el corazón y te llenan de amor.
   - Hablar con mi madre y con mi padre - siempre me dan buenos consejos y los quiero un montón.
   - Hablar y reflexionar con Paula - hace que me sienta muy afortunada de tenerla. Reflexionamos y mejoramos nuestras vidas. Aprendemos mucho la una de la otra y nos apoyamos mutuamente.
   - Sentir que mi familia está ahí para apoyarme - es super importante, me di cuenta sobre todo cuando estaba en Canadá. Hace que te sientas querido y seguro, como un refugio al que volver cuando no te sale nada bien.

Esta última me hace pensar en lo mal que se lleva el elfo con su familia y lo importante y necesaria que es esta en su vida. Me da mucha pena porque, como le dije a él una vez, sus padres son su mayor limitación cuando deberían ser su mayor apoyo.
Respecto a él, he llegado a la conclusión de que no me arrepiento para nada de haberle conocido ni de haber vivido lo que he vivido con él, de hecho me alegro. Me ha enseñado muchas cosas.
Gracias a él estoy viendo lo que falta en mi vida para ser feliz y que tengo que resolverlo. Sé que no le necesito para vivir, encontraré el equilibrio y la felicidad por mí sola; pero sí siento que prefiero tenerlo en mi vida, antes que no tenerlo. Ahora ya, que lo sigamos intentando como pareja o seamos solo amigos, el tiempo y el instinto lo dirán.

Y a él le diría eso, que no podemos esperar que otras personas vengan y arreglen nuestra vida por nosotros, tenemos que hacerlo personalmente. Es como en mi caso, cuando estaba con él era más feliz, pero necesito encontrar una solución real para la ausencia de algo que él está cubriendo.
Y sin embargo, querer rodearnos de gente que nos hace felices y nos apoya en la búsqueda de esa felicidad no está mal. No podemos librar solos todas nuestras batallas. La diferencia está en buscar que esas personas sumen a nuestra felicidad, no que la completen.

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Después vi una cosa que me dolió muchísimo (caí en la trampa de instagram). Me volvió a dar el bajón y estuve llorando de nuevo. Más tarde, todavía muy muy triste escribí 'Y Quizás Sea Un Favor'. Un poco para decírselo a él, un poco por convencerme a mí misma. Para sacar el dolor de dentro. Convertir el veneno en tinta.